Los trabajadores de los talleres de Peugeot España se reunieron delante de la sede Peugeot de Las Tablas, en Madrid, para protestar contra los recortes salariales anunciados por la empresa. La manifestación de Madrid fue parte de las numerosas concentraciones de los trabajadores de Hispanomoción – la red concesionaria de Peugeot España – que se tuvieron por todo el territorio nacional durante el día 4 de septiembre, cuando los sindicatos convocaron una huelga de 24 horas en los concesionarios de la marca automovilística francesa.
Una huelga convocada para protestar contra los recortes salariales que afectarán a partir de este mes a 295 empleados de los talleres Peugeot presentes en España.
La empresa pretende rebajar los incentivos por productividad en los talleres españoles, medida que tendrá como consecuencia una bajada del sueldo de cada trabajador de unos 300 euros mensuales, según lo que ha denunciado CCOO.
Además, debemos recordar que los 295 trabajadores de los veintidós centros Peugeot ya están afectados desde el 1 de enero de 2014 por un Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) .
Los sindicatos han llevado el “caso Peugeot” ante la Justicia, aunque esperan poder volver a negociar con la empresa francesa y llegar a un acuerdo.
La huelga de este jueves tuvo un seguimiento casi total. Un ejemplo es la participación en la huelga en el taller de Villaverde, donde de 47 trabajadores, solo uno decidió no participar en la protesta.
Los trabajadores de Villaverde recuerdan que hace poco este taller estaba compuesto por 80 empleados. En 2013 Peugeot hizo un ERE que redujo el personal de la plantilla, que ya había sido afectado por varias recolocaciones durante los últimos años.
La manifestación delante la sede de Las Tablas se concluyó con una asamblea de los trabajadores que votaron a favor de una semana entera de huelga en los talleres de Madrid, que debería tener lugar de 22 a 27 de este mes. La mayoría consideró importante seguir con la protesta y no limitarla a un día puntual durante los meses a seguir. El hecho de poder parar el trabajo en los talleres y afectar directamente a los clientes de Peugeot y, en consecuencia a la empresa, pareció la solución más valorada por los manifestantes.
Sigue siendo un año terrible para los empleados del grupo PSA Peugeot-Citroën, un grupo nacido por la fusión de la dos empresas francesas, el segundo constructor de Europa. El -15% de venta de vehículos en Europa en el comienzo de 2013 tuvo como consecuencia un plan de reestructuración que afectó a miles de trabajadores en toda Europa.
Además, a mediados de 2014 PSA anunció una acuerdo con Santander para financiar la compra de coches del grupo francés. Un acuerdo que preocupa a los empleados de la financiera francesa, que no saben todavía cómo serán afectados por esta fusión entre los dos grupos.
Entre preocupaciones y futuro incierto, sigue la protesta en los talleres, en la espera de noticias tranquilizadoras.