de PIERTONI RUSSO.

Un Pablo Iglesias lleno de alegría se presentó delante de la prensa el jueves pasado para comentar los resultados electorales del 24-M. Acompañado por Luis Alegre y Carolina Bescansa –entre otros- el líder de Podemos destacó dos posibles lecturas con referencia a la tendencia hacia el cambio que se puede deducir por el resultado de las elecciones: 1) las grandes ciudades han demostrado ser las “locomotoras” del cambio; 2) el declive del bipartidismo PP/PSOE ya es una tendencia irreversible.

Iglesias hasta admitió haberse quedado un poco desilusionado por el resultado, porque se esperaba un cambio todavía más rápido que evidenciara de forma más clara la decadencia de los principales partidos de gobierno. Sin embargo -subrayó el secretario general de Podemos- se trató de un resultado sin precedentes en la historia de España, visto que ningún otro partido ha llegado a tener un éxito tan grande en solo un año de vida. El líder de Podemos se mostró especialmente feliz por el resultado, porque muchos políticos y medios de prensa – en la víspera de las elecciones – habían hablado de Podemos como de un partido en crisis, hundido por el “caso” Monedero, y sin perspectivas para el futuro. Hipótesis que han sido confutadas en estas elecciones. Por otro lado, se destacó el hecho de que el bipartidismo tuvo su peor resultado en los últimos 30 años. Un resultado que certificó que Podemos ya está presente en el mapa político de España y no puede seguir siendo considerado como si fuera un partido más.

Iglesias comentó que ahora “tenemos que asumir que Podemos se ha convertido en la referencia fundamental del cambio, en un espacio para el protagonismo ciudadano” y que tendrá un papel de protagonista en los gobiernos de los municipios y de las comunidades de toda España.

Con referencia a los posibles pactos electorales, dijo que el partido tratará de evitar que el PP gobierne, y llegará a acuerdos con otros partidos, si estos últimos darán un giro de 360º , asumiendo que recortes y corrupción son los principales problemas a los que se tienen que enfrentar los partidos políticos españoles. Si el PSOE asume esta valoración y se compromete a un plan de rescate ciudadano, el diálogo entre estos dos partidos será posible. Pablo Iglesias subrayó que ahora Pedro Sánchez sí lo llama –cosa que nunca había hecho antes- y está previsto un encuentro entre los líderes de ambos partidos en los próximos días. Sin embargo –añadió el secretario general de Podemos– su partido nunca formará parte de gobiernos presididos por candidatos del PSOE. Cosa que no excluye que los concejales de Podemos o de las listas unitarias puedan apoyar a este partido en el gobierno de su ciudad o comunidad.

Iglesias dijo que ahora es evidente que el tono que emplean los otros partidos con Podemos es muy diferente respeto a antes de las elecciones. Está claro que hay una atmósfera distinta y el hecho de que ahora haya diálogo certifica el avance en la relación entre estos partidos que podrían llegar a un entendimiento entre ellos.

Pero- aclaró Iglesias- los que han cambiado su posición son ellos y no nosotros. Ha cambiado la posición de Pedro Sánchez que ahora ya no dice que no va a pactar con el populismo. “Nosotros no hemos cambiado y seguiremos llamando corruptos a los corruptos y sin vergüenza a los sin vergüenza”.

A quien le preguntó si Podemos llegará a apoyar a Susana Díaz para la investidura en el gobierno de Andalucía, Iglesias contestó que ellos siempre han puesto tres condiciones a Díaz para poder ser apoyada por Podemos. Cuando la presidenta andaluza rectifique su posición, Podemos facilitará su investidura.

Por último, Iglesias destacó el enorme trabajo hecho por Manuela Carmena a lo largo de toda la campaña electoral madrileña; una mujer con una gran experiencia y con una gran empatía. “Nosotros de Podemos – concluyo Iglesias – hemos aprendido muchísimo por Manuela”, que utilizó una gran estrategia electoral y que les puede seguir ayudando enormemente para continuar a crecer y a mejorarse.