Todo bien hasta hoy. Hasta el minuto 801’ de invulnerabilidad como local del meta belga Thibaut Courtois, el minuto 52’ del partido Atlético de Madrid – Real Sociedad, cuando Xabi Prieto mete – en probable fuera de juego – el gol que sanciona la primera derrota del Atlético después de 14 victorias consecutivas en su feudo, el Vincente Calderón.
Hoy todo va mal. El Real Madrid gana unas horas antes en casa del Celta Vigo y alcanza la segunda posición en la clasificación de la Liga, pasando, después de una carrerilla de varios meses, por delante del los antagonistas de siempre de la otra orilla de la capital. El Atlético tiene que ganar: para quedarse segundo en la clasificación, para volver a marchar con el ritmo de los últimos meses de 2012, y para celebrar a lo grande la renovación de Diego Simeone por otros cuatro años como guía del equipo rojiblanco.
No todo lo deseado se realiza en la realidad. En la primera parte se evidencia un dominio vano del Atlético que juega un fútbol mejor y que tiene más oportunidades de marcar que la Real Sociedad. Sin embargo, los delanteros del Atlético nunca consiguen acercarse a la portería. La mayoría de las veces disparan a larga distancia sin conseguir hacer brecha en la defensa bien colocada por el técnico Philippe Montanier. Es un asalto inútil que dura los primeros 45′ y que solo sirve para resaltar la contra del equipo huésped, que demuestra poder controlar el partido sin sufrir excesivamente el juego del Atlético. La primera parte acaba sin grandes emociones. Todos se esperan un segundo tiempo más electrizante, quizá esperando una jugada fenomenal de Falcao que pueda solucionar el partido. Nada de todo esto. El Atlético se queda corto de agresividad y una dormida de la defensa permite al mediopunta Xabi Prieto plantarse solo ante Courtois y marcar con un túnel majestuoso.
El Atlético reacciona de forma desordenada, los jugadores se vuelcan en la mitad de campo de la Real con mucho arrebato y muy poca lucidez. Aumenta de forma desproporcionada el número de faltas por ambos equipos. Los jugadores del Atlético están nerviosos y el público empieza a pitar. El partido acaba en el nerviosismo general, con los rojiblancos que se quejan con el árbitro de la conducción del partido, y con los aficionados que dejan el Calderón todavía alterados por la discutible conducción de la terna arbitral.
Diego Simeone, en la rueda de prensa, admitió una mejor organización de juego de la Real Sociedad y encontró analogías entre este partido y la derrota en la Liga Europea del pasado 14 de febrero contra el Rubin Kazan.
La derrota nada cambia en referencia al desarrollo de la Liga. El Atlético se queda tercero y, posiblemente, esta es la plaza que le espeta. Trece puntos de ventaja sobre Málaga y Real Sociedad son una garantía para el acceso a la próxima Liga de los Campeones. El Atlético de este año puede reputarse satisfecho por lo visto durante esta Liga y, concentrarse en el verdadero objetivo: la Copa del Rey. Los aficionados rojiblancos lo remarcaron por medio de las tiras expuestas en el frente atlético del Fondo Sur del Calderón.
El Atlético tiene tiempo para recuperarse y para recuperar su estrella, Radamel Falcao. Parece que este sea el momento opaco para los sudamericanos. En Europa, hay tres grandes delanteros de Sudamérica que en este momento están padeciendo las consecuencias de una temporada muy larga, con demasiados partidos y sin la posibilidad de tomar aire: el mismo Falcao y Lionel Messi en España, y Edinson Cavani en Italia. Importante es descansar ahora para no llegar a la fase crucial de la temporada corto de energía.
Últimos comentarios: un elogio a la Real Sociedad que ha demostrado saber jugar al fútbol y merecer la cuarta plaza, la última útil para el acceso a la Liga de Campeones. Desde la sala de prensa del Vincente Calderón se podía oír la fiesta montada por los jugadores en el vestuario de la Real Sociedad. Un equipo que está haciéndolo muy bien y que puede llegar muy lejos. Un elogio también a los aficionados del Atlético, que durante todo el partido han aclamado a Cholo Simeone, verdadera alma de este equipo, y que han celebrado el acceso a la final de Copa del Rey con una coreografía maravillosa en el Fondo Sur, relleno de banderas de España. Por último, enhorabuena a Thibaut Courtois: ya es parte de la historia del Atlético de Madrid.