Madrid se rebela, Madrid no tiene miedo al cambio, Madrid se cansa de los infinitos engaños del Partido Popular.
Después de un cuarto de siglo bajo el gobierno del PP, Ahora Madrid, plataforma formada por Podemos y Ganemos y liderada por Manuela Carmena, logra lo más grande, llegar a un puñado de votos del empate con el PP en el ayuntamiento de la capital. Un éxito todavía más grande si pensamos que el partido conservador estaba encabezado por Esperanza Aguirre, el peso pesado del partido de Mariano Rajoy en Madrid, la única que podía evitar este cambio.
Pero Madrid quiso cambiar, cansado de demasiados años pasados bajo un régimen conservador, que ha empeorado perceptiblemente la calidad de la vida de capital, interesado solo en los intereses personales a menoscabo de la población.
Y el pueblo de Madrid ha tenido el enorme valor de creer en el cambio, y se ha presentado a las mesas electorales con la intención de revolucionar el panorama político de su ciudad.
Una resultado inesperado, que de momento, visto el sustancial empate entre la candidata del PP y la de Ahora Madrid, no permite ostentar todavía una ganadora clara. Solo el “juego” de los pactos de gobierno podrá aclarar a lo largo de las próximas semanas quién podrá gobernar con mayoría en la capital.
Lo que resulta evidente es que Esperanza Aguirre, la más votada en estos comicios electorales, no podrá gobernar. Cosa que sí podría hacer Manuela Carmena.
Esto porque, teniendo en cuenta los resultados electorales en el ayuntamiento de Madrid, el PP no lograría la mayoría absoluta juntándose a Ciudadanos – lo que esperaba conseguir en la víspera de las elecciones – porque los dos partidos de centro derecha, juntándose, solo lograrían 28 concejales, que no son suficientes para llegar a ser mayoría.
En efecto, la mayoría necesitada para gobernar en la capital es de 29 concejales, estando formado el ayuntamiento por un total de 57 concejales.
En cambio, un posible pacto entre Ahora Madrid y PSOE, representado en este ayuntamiento por Antonio Miguel Carmona, sumaría 29 concejales, justo lo que se necesita para gobernar.
El mismo Carmona ya ha tendido la mano a la candidata de Ahora Madrid para un posible pacto electoral.
El PSOE tiene bien claro que dejar al PP seguir gobernando en Madrid sería un suicidio político. La misma Esperanza Aguirre, en una breve y deprimente rueda de prensa cuando ya estaba claro el éxito de los escrutinios, ha declarado que “ha recibido el mensaje de los madrileños”, y que ve complicado poder convertirse en la nueva alcaldesa de la capital. Una derrota política que podría llevar a Aguirre, una mujer poco acostumbrada a los fracasos políticos y personales, a apartarse definitivamente de la vida política.
Bien otra atmósfera se respiraba en la Cuesta de Moyano de Madrid, donde se reunieron los votantes de Ahora Madrid para celebrar a Manuela. La probable nueva alcaldesa apareció visiblemente emocionada y comentó: “Ha ganado una mayoría por el cambio. Esta mayoría no la han ganado los partidos, sino la ciudadanía de Madrid. Ahora tenemos que seducir a los electores que no nos han votado que este cambio vale la pena. Y lo vamos a hacer tan bien que les vamos a seducir. Madrid tiene que ser una ciudad decente, justa, equilibrada, innovadora, dinámica y acogedora”.
A pocos centenares de metros, en la plaza del Reina Sofía, estaban también los políticos de Podemos, saludando a su gente. Entre ellos Íñigo Errejón y Pablo Iglesias.
El Secretario de Política de Podemos agradeció a toda la gente que había ayudado a hacer una campaña política exaltante que lograba colocar un nuevo actor en el tablero político español: el pueblo. Las instituciones – subrayó Errejón – deben ahora colocarse al servicio de la ciudadanía para recuperar la soberanía popular. Errejón se sintió seguro de poder afirmar que España ya está cambiando, y el cambio definitivo está al alcance de la mano.
La noche electoral se concluyó con las declaraciones del Secretario General de Podemos, Pablo Iglesias, que subrayó que los principales partidos tradicionales, PP y PSOE, han obtenido uno de los peores resultados de siempre, en una jornada electoral que ha confirmado el fin del bipartidismo en España. Según Iglesias ahora la gente es la verdadera protagonista de un cambio histórico, en una primavera del cambio que llevará a una posible victoria en las elecciones generales de noviembre. Por último, el secretario, dijo que en los ayuntamientos, a partir de mañana, se sentarán personas normales y sencillas que viven como la gente, y que darán la cara por la gente. “El cambio ha venido para quedarse, y estamos viviendo una revolución democrática que nace de la mano de la gente”.
misma Esperanza Aguirre, en una breve y deprimente rueda de prensa cuando ya estaba claro el éxito de los escrutinios, ha declarado que “ha recibido el mensaje de los madrileños”, y que ve complicado poder convertirse en la nueva alcaldesa de la capital. Una derrota política que podría llevar a Aguirre, una mujer poco acostumbrada a los fracasos políticos y personales, a apartarse definitivamente de la vida política.